Potente Amuleto de protección | Rituales hechizos de amor Viaje Astral Amuletos y talismanes
Vamos a transformar un rosario común en un amuleto de protección contra el mal de ojo, las energías negativas y las envidias, que puedan acechar al portador, de este amuleto. Lo deberá de llevar junto a él, durante todo el día para mejorar su efectividad.
Su alto poder de protección puede salvar de momentos de gran tensión, de problemas, de malas relaciones personales y de situaciones inesperadas.
Ingredientes necesarios para realizar el amuleto:
– 1 Rosario. – Agua bendita. – Ungüento de pétalos de margaritas, rosas y girasoles mezclados con aceite.
– 1 Vaso.
Pasos a seguir:
Conseguiremos un rosario, uno que nos guste que cuando lo veamos nos de una sensación de paz, que nos parezca precioso por sus colores, estética y diseño. Seguidamente, una noche a las 12 en punto, rellenaremos el vaso de agua bendita (puede ser cualquier vaso) e introducir el rosario en él, y lo dejamos toda la noche en frente de la luna, para que haga todos sus procesos.
Al día siguiente el rosario estará completamente ritualizado, lo sacaremos del vaso y seguidamente comenzaremos, a hacer el ungüento de pétalos de flores y aceite.
Cogeremos los pétalos de rosa, margarita y girasol los introduciremos en un mortero, echaremos 5 chorreones de aceite y picaremos y mezclaremos, hasta que quede una semi-masa de pétalos picados y el aceite.
Después, directamente del mortero nos los untaremos todo en las manos, y haremos una imposición de manos al rosario con gran concentración y relajación, pensando en que nos de una gran protección a nuestra vida. Estaremos haciendo esto durante 5 minutos, una vez acabados los 5 minutos, el rosario ya estará impregnado de nuestra energía.
Este ungüento hace que el rosario ritualizado se conecte con nuestra energía vital y nos de protección a nosotros únicamente.
El rosario estará ligado a nosotros de por vida.
Una vez acabados todos los pasos lo tendremos colgado siempre, al cuello o junto a nosotros, y no dejaremos que nadie lo toque para mayor efectividad y cautela, ya que muchas personas podrían transmitirnos sus malas energías, envidias o mal de ojo.